En Oaxaca hay 4 millones de habitantes, de los cuales poco más de 1.2 millones hablan lenguas indígenas, sin embargo de los 16 grupos étnicos existentes hay 5 grupos étnicos lingüísticos que están en riesgo de desaparecer, detallando que dos lenguas originarias ya se extinguieron el solteco y pochuteco.
Víctor Cata, director del Instituto de Lenguas Indígenas de Oaxaca, dijo que en materia lingüística Oaxaca vive una crisis, porque lenguas como el Xjuani e Ixcateco, que se hablan en Santa María Ixcatlan, están riesgo, pues solo dos hablantes la conocen y practican.
En las mismas condiciones están las lenguas Ngiba y Ngigua –variantes chocholtecas-, que se hablan en Santa María Nativitas y Santa María Tejapalapa; en ellas solamente tres personas las practican.
Otro caso en grave riesgo de extinción es el Lagitaygi, un derivado de la lengua chontal, que se habla en San Pedro Huamelula (Itsmo de Tehuantepec); ahí solamente tres habitantes la conocen y usan cotidianamente. Otra lengua en riesgo es la Umbeyajt, que proviene del huave del Itsmo; se habla en San Francisco del Mar y el Angpon tsme, del zoque de Santa María Chimalapas, con cuatro hablantes.
En Oaxaca las lenguas predominantes son el zapoteco y mixteco; se hablan en la mayoría de los 418 municipios regidos por el sistema normativos internos, pero se trabaja para rescatar y revitalizar la identidad cultural y prehispánica de todos los pueblos originarios.
En 2023, el tejate fue declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de Oaxaca como un reconocimiento al valor histórico de esta bebida ancestral, así como al trabajo de las más de 120 mujeres tejateras de San Andrés Huayápam, quienes han logrado consolidar la marca colectiva “Sabor a Huayápam”.